Organiza Grupo Literario Tardes de la Biblioteca Sarmiento
Susana Miranda
La madre del agua
viene y se va
calibrando la anchura del cielo
despierta un juego
capaz de señales
Un hombre de silencio abierto
sonríe en su barba
de pájaros muertos
y llaves perdidas
Él está donde a veces
sueño que me ve
y es el único lugar
donde su tiempo es
—un lugar tan inconcreto
como un abrazo de luna
arenas esperando
árboles mirándonos—
El hombre sonríe en su mirada
con complicidad
casi nocturna
La madre del agua
viene y se va.
Organiza Grupo Literario Tardes de la Biblioteca Sarmiento