Porque fue de los hombres el mas bueno
y porque la verdad, cual luz del día,
en sus divinos labios florecía,
clavaron en la cruz al Nazareno.
¡A El, que venía de excelencias pleno,
a El, que el tesoro de la Fe traía,
que era el amor y la sabiduría!...
¡Cómo cuesta creer en tanto cieno!
¿Por qué, mientras que a El se lo escarnece
y en el leño infamante sacrifica,
a Barrabás se ensalza y engrandece?
¡La mente, anonadada, no se explica
por qué, en tanto a los truhanes se enaltece,
a los hombres de bien se sacrifica!
Albino Suárez Gómez